Ya nos hemos acostumbrado, en parte, a que los cambios tecnológicos se desarrollen a una velocidad mucho mayor a la que podemos llegar a predecir. Las últimas dos décadas han sido más que vertiginosas en ese sentido y los cambios que se dan en el mundo financiero e informático son los casos más paradigmáticos del gran ritmo de cambio que tiene el siglo XXI. En ese sentido, nos centraremos en uno de los grandes fenómenos de la actualidad: los videojuegos que incluyen criptomonedas. En el siguiente artículo, todo lo que debes saber al respecto.
No resulta para nada exagerado afirmar que las criptomonedas se encuentran cambiando al mundo y a sus distintas industrias. De más está decir que han trastocado para siempre al sector financiero, pero su efecto no se ha limitado solo allí, sino que también han atravesado al arte y ahora también a una de las industrias más importantes de la actualidad: los videojuegos. En cierto sentido, ya podemos afirmar que el boom de las monedas digitales ha superado por completo a Bitcoin o a la segunda criptomoneda más popular de todas, que es Ethereum. ¿De qué se trata esta nueva tendencia?
Las monedas relacionadas a los videojuegos se encuentran viviendo un boom en todo el mundo y sus precios han comenzado a dispararse. Muchos se preguntan si vale la pena invertir en ellas. Todo se da en un contexto en el que el negocio alrededor de los videojuegos va en aumento: streamers y competencias internacionales permiten que sean cada vez más las personas que hagan una carrera profesional alrededor de los juegos en línea. Monetizar con esta industria no es nuevo, aunque las criptomonedas parecen agregarle un factor más que interesante a tener en cuenta.
Así entonces, nos encontramos con los denominados “videojuegos blockchain”, en donde a partir de esta sofisticada tecnología logran dar premios monetarios a los usuarios que logren avanzar a lo largo del juego. Para ello, se utilizan los cada vez más celebres NFTs (sigla inglesa para los tokens no fungibles). Se trata de una criptomoneda que posee una identificación única y no podremos encontrar dos iguales, a la vez que cuentan con la firma de su autor y aportan mayor transparencia ya que se pueden ver de manera pública y todas las transacciones quedan registradas. Lo curioso es que en su interior puede caber cualquier archivo en formato digital, lo que a su vez las convierte en coleccionables.
En definitiva, más allá de la satisfacción por avanzar y por el triunfo, ahora los usuarios de videojuegos también pueden obtener una recompensa económica a través de estas NFTs que se pueden intercambiar por las criptomonedas tradicionales. Al mismo tiempo, ese mismo progreso dentro del videojuego y que se transmite en NFTs puede servir para pagar un producto dentro del mismo juego, sin necesidad de gastar nuestro propio dinero. Ya grandes marcas como Louis Vuitton han lanzado propuestas similares y se espera que la tendencia siga en aumento.