La era digital ha venido planteando cambios radicales en el modo de consumo de la televisión, y de los medios tradicionales en general…
El comportamiento de las audiencias ha venido evolucionando a la par de los avances tecnológicos y por momentos parece que la tele no pudiera (¿o no quisiera?) terminar de adaptarse a éstos.
Hoy en día, el consumidor manda, la grilla de programación ha muerto, la tele ya no le dice a su audiencia qué ver y cuándo verlo, sino que es ésta última quien elige “qué”, “cuándo” y hoy día también, “dónde” ver sus contenidos favoritos.
Uno de los principales (sino el principal) responsables de este cambio en la tradicional y unidireccional relación entre la TV y la audiencia es la plataforma de contenidos Youtube, quien rápidamente se ganó el mote de “enemigo de la TV”.
En esta época en que prima la inmediatez y la hiperactividad del consumidor, el planteamiento de la televisión tradicional comenzó a tornarse obsoleto a la vista de las nuevas generaciones y como consecuencia, la audiencia de Youtube se compuso rápidamente por todos aquellos individuos que ya no encontraban entretenimiento en la grilla de programación rígida y tradicional.
Este nuevo “enemigo” vino a satisfacer la misma necesidad que satisfizo la televisión durante décadas: brindar entretenimiento. Pero, ¿es realmente un enemigo?
Después del pánico inicial de algunos y la mirada desconcertada de otros, los broadcasters comenzaron a reaccionar y se han dado cuenta (tal vez no todos aún) que los canales de TV no son más que generadores de contenidos y entretenimiento, ya no para la TV ubicada en el centro de la sala del hogar, sino generadores de contenidos y entretenimiento multiplataforma. Que tal vez Youtube no es el enemigo que aparentaba ser y en realidad le está permitiendo a los canales de TV (y a los anunciantes) llegar nuevamente a esos segmentos a los que ya no llegaban. Youtube le está permitiendo a la TV conocer mejor la composición y las preferencias de su audiencia y por ende, haciendo más eficiente la publicidad.
Hoy en día son incontables los broadcasters de TV que cuentan con su propio canal en Youtube, que suben las emisiones de sus producciones y shows, que promocionan sus programas, e incluso broadcasters que producen “webisodios” de sus programas de aire adaptados a las características de consumo de los youtubers. Ya son varios los shows de TV que multiplican el rating obtenido por su salida al aire, producto de las visualizaciones posteriores a través de Youtube y varios también los programas y celebridades surgidas en Youtube que ocupan ahora espacio en la programación de la TV lineal.
[smartads]
En conclusión…
La experiencia está demostrándonos que la televisión lineal y Youtube se complementan y se retroalimentan positivamente entre sí, que tienen mucho por aprender el uno del otro y que ambos sistemas están aún en un proceso de adaptación mutua.
¿Qué pasará en el futuro? Tal como lo planteara Charles Darwin, la supervivencia no será del más grande, ni del más fuerte, sino del que mejor se adapte a los cambios.
Ver más artículos de Fabian Cabral Guillama | Conviérte en Autor: Más info. aquí – Ver autores aquí