Publicidad /Hace un tiempo que no observo casos de vampirismo en publicidad, si era muy frecuente hace unos años. Aunque lo primero, para hablar de vampirismo publicitario sería ver y definir que es exactamente el vampirismo en publicidad.
El vampirismo en publicidad, es algo que no es positivo como se puede presentir; pero no tiene nada que ver con la competencia ni con otros anuncios publicitarios sino con el mismo anuncio. En sí, el vampirismo publicitario es cuando el anuncio presenta una situación, un gag, un tipo de grabación, animación o cualquier otro detalle que hace que finalmente, recordemos lo visto pero no la marca que se anunciaba.
Es decir, «las imágenes» (o cualquier otro detalle del anuncio) si se recuerda, pero no la marca. Por tanto, la primera se ha comido a la recordación de marca y la ha vampirizado; hecho que lógicamente no es bueno para el anunciante ya que de poco o nada sirve que el público en general -o una parte de él- recuerde el anuncio como -(ejemplo inventado)- «Aquel tan gracioso de la señora que va y entra en una tienda y entonces….etc….» pero…. ¿Quién era el anunciante?
Como decía anteriormente, en un pasado si recuerdo varios anuncios de diferentes marcas que, por teorizar con ellos entramos en debate varios profesionales relacionados con la publicidad y el marketing recientemente en una charla entre amigos. No soy participe de mencionar ninguno, ya que hay marcas conocidas y profesionales detrás de éstos anuncios, grandes inversiones, etc. aunque es cierto que hace un tiempo que el vampirismo en publicidad creo que está muy superado y las marcas miran bien que la presencia de marca y notoriedad de ésta, no les haga caer en el vampirismo publicitario del que se habló y teorizó mucho allá por los años 90 en los que se podían encontrar muchos casos.
Es bien posible que recuerden más de un anuncio en que se producía el mencionado «vampirismo», simil a que algo presente en el anuncio «chupaba la sangre» a la marca/anunciante que no era recordada.
[smartads]
De todas formas, como éste tema es algo subjetivo, más teniendo en cuenta que ahora personalmente si debo de analizar los anuncios que veo y sobretodo recordar las marcas anunciantes; quizás muchos de nosotros si encontremos anuncios (no necesariamente spots de televisión, aunque también y es donde más posibilidades hay de que se produzca éste efecto «draculiano») en los que el mensaje, imágenes, protagonistas, hechos, etc,. que suceden en el anuncio publicitario, hacen que la marca anunciante no se recuerde y sea vampirizada; de acuerdo a lo comentado.
David Guiu / SOCIALetic.ocm