El Marketing de Permiso o “Permission Marketing” es un término creado por Seth Godin, empresario estadounidense, graduado en informática, filosofía; también obtuvo un Máster en Administración de Empresas en Marketing en la Stanford University.
Por Belinda Bages belindabages.com – @BelindaBages
Se considera a Godin uno de los teóricos de Marketing más importantes de este siglo XXI. Creó la empresa Yoyodyne Entertainment, comprada por el motor de búsqueda Yahoo!. Además de crear el término Marketing de permiso, creó el de Marketing viral.
Marketing de interrupción
Para explicar el término de Marketing de permiso, debemos definir el de Marketing de Interrupción. Éste último también se puede explicar de manera rápida, utilizando el término de SPAM. Así es, el marketing de interrupción, es todo aquel correo electrónico, que llega al buzón de un usuario, sin que éste haya dado su permiso. La interrupción generada por este correo hace que el usuario en el mejor de los casos llevae directamente el correo en la carpeta “SPAM” o correo indeseable de su bandeja y clasifique al propietario de este correo como marca intrusiva en su mente de consumidor. En el peor de los casos, el usuario acude a la ley de protección de datos para denunciar al fatigoso anunciante. En conclusión, el Marketing de interrupción no es ventajoso ni para el anunciante, ni para el usuario.
Marketing de permiso
Se trata del marketing que pide la autorización del internauta para enviarle información sobre la marca a su buzón de correo electrónico. Esta técnica puede ser uno de los objetivos de una campaña de Marketing Online: conseguir “leads” (CPL), internautas que pincharán en el banner del anunciante y rellenarán un formulario solicitando información sobre productos o servicios que ofrece la empresa.
[smartads]
Esta técnica de marketing ofrece grandes ventajas como : por parte del usuario poder personalizar la comunicación que recibe y leer sobre empresas en las que realmente esté interesado; por parte del anunciante el punto positivo es comunicar directamente a su “target“, obteniendo así relevancia en su comunicación.