Nuestra habitación y nuestra oficina son los lugares donde, a lo largo del día, más tiempo pasamos. La decoración de estos entornos físicos influye notablemente en nuestro rendimiento final, ya sea como estudiantes o como empleados.
Es importante encontrarnos en un sitio en el que el mobiliario sea el adecuado para las tareas que vayamos a realizar
Que esté limpio y ordenado, ya que estos pequeños detalles favorecerán nuestro estado de ánimo, las ganas de comenzar las actividades que tengamos pendientes, la capacidad de atención y la creatividad. Para encontrar los muebles perfectos podemos acudir a diferentes centros como zasmobel.com u otras de similares características.
Por ello, debemos organizar el espacio de la mejor manera para sentirnos lo más cómodos posible.
Lo primero que tenemos que hacer con respecto a la decoración es delimitar cada espacio para el uso que tendrá. Por ejemplo, en una habitación el escritorio deberá estar al lado de la ventana para recibir la máxima luz natural posible, puesto que ésta ayuda a obtener una memorización más clara y notable rapidez mental que nos ayudará en nuestros estudios y en cualquier situación que se nos pueda presentar. En lo referente a la oficina, cada espacio tendrá una finalidad diferente, ya que existen momentos en los que necesitaremos calma para concentrarnos y otros en los que necesitaremos un agradable rincón con sillones y una mesita donde podamos mantener una conversación en grupo o con clientes.
Estos lugares son nuestro refugio en las largas horas del día a día, por lo tanto, es imprescindible que estén a nuestro gusto, a nuestro personalizado estilo y con un diseño propio que nos inspire confort.
Para ello, podemos decorar las paredes con alguna frase que siempre nos haya motivado o con alguna con la que, simplemente, nos sintamos identificados. También podemos poner marcos de fotos que nos recuerden nuestros mejores ratos con aquellas personas que nos inspiran a avanzar y ser mejores. Éstas son cosas que siempre tenemos en casa, pero con las que también podemos ambientar la oficina. Sin embargo, no conviene abusar ya que se trata de elementos con los que nos podemos distraer.
El color es algo muy importante a tener en cuenta porque nos influye emocionalmente. Por tanto, debemos elegir con cuidado el que más nos guste porque será el que nos acompañe, al menos, hasta la próxima reforma. Tiendas como zasmobel.com u otras tienen muy distintas combinaciones de cuartos juveniles o de oficinas y despachos en variados colores al gusto del cliente. El blanco es adecuado para oficinas pequeñas puesto que da sensación de amplitud y modernidad. El azul también puede usarse para cualquier ambiente puesto que se asocia a la relajación y a la confianza, pero es conveniente combinarlo con alguno más cálido como el amarillo para evitar la tristeza de los colores fríos. El marrón, en pequeñas cantidades, aporta compromiso y responsabilidad.
Por último, para tener todo en orden y aumentar realmente la productividad, se debe mantener una temperatura adecuada: 23-26 grados en verano o 20-24 en invierno.