Es posible que estés pensando en aumentar tu presencia en internet. Ya sea porque posees un negocio y quieres distribuir en la red o porque deseas disponer de un blog personal en el que postear tus reflexiones, contar con un sitio web es en la actualidad algo imprescindible para cualquier usuario.
En general existe un gran desconocimiento en lo que a creación de sitios web se refiere. Si bien el dominio o dirección web es un paso que todo el mundo conoce, no ocurre lo mismo con el hosting, un espacio digital que todo dominio precisa para funcionar.
Antes de entrar de lleno en cómo elegir el hosting perfecto, es preciso que conozcas qué es un hosting y por qué no debes contratarlo al azar. El hosting es un servidor que te garantiza disponer de un espacio digital para poder almacenar toda la información necesaria para disponer de tu web. Existen numerosos hostings en el mercado y la mayoría de las empresas, como los hosting de Raiola Networks, ofrece varias posibilidades para diversos perfiles de contratación.
Qué mirar a la hora de decantarse por un hosting
Una vez comprendido lo que es un hosting, ha llegado el momento de comparar en qué se diferencian los diversos hostings que puedes encontrar por internet. Así, es importante que tengas presente qué tipo de perfil estás buscando para tu web.
Aunque la mayoría ofrece información al respecto, en ocasiones algunas empresas dan por sentado que cuentas con la información precisa para su contratación. Por ejemplo, una tienda o comercio digital deberá contratar un hosting que ofrezca mayores garantías que un blog personal. Por ello, en todas las características que detallamos a continuación no olvides tu objetivo.
1. Servicio de atención al cliente
Pese a que alguien pueda discrepar en la importancia de este punto, el servicio de atención al cliente es una de las características que debes mirar a la hora de contratar un hosting. Algunas empresas ofrecen un servicio limitado, de 9.00 a 22.00 h; otras, por su parte, están disponibles las 24 horas mediante su chat. Esta disponibilidad se traducirá en el acceso a tu página web, ya que, ante cualquier imprevisto, deberás contratar con el servicio técnico e intentar solucionar el problema cuanto antes.
Por supuesto, el servicio técnico depende de la página web de la que dispongas. Por ejemplo, un comercio digital no puede permitirse tener su web caída durante un largo periodo de tiempo. No ocurre lo mismo con páginas web de información o blogs personales, cuyo colapso no supone una pérdida económica directa para sus propietarios.
2. Potencia o tiempo de carga
El tiempo que una página web tarda en cargarse es la manera más rápida de medir la calidad de un hosting. Aunque una velocidad lenta puede deberse a diversas causas (por ejemplo, imágenes sin optimizar), lo cierto es que la velocidad de carga está intrínsecamente unida a la tecnología de la que dispone el hosting en cuestión. Por ello, debes conocer qué servicio te ofrecerá el hosting que contrates, ya que una página web lenta es abandonada sistemáticamente por los usuarios.
3. Espacio disponible
El espacio en disco permite a los usuarios cargar, eliminar y visualizar diferentes elementos que se van almacenando en la nube. Por ello, es una de las primeras características que estos suelen consultar, ya que, como ocurre con los teléfonos móviles, los clientes asocian la capacidad con la calidad del servidor.
Como hemos comentado antes, antes de contratar tu hosting idóneo debes tener presente qué tipo de negocio quieres ofrecer. En la mayoría de los casos, no es preciso contratar un gran espacio en la nube. De hecho, en la práctica los usuarios son propensos a contratar un espacio del que apenas hacen uso. Por ello, nuestra recomendación es que no te dejes llevar por eslóganes fáciles o «espacios ilimitados». Estudia tu circunstancia personal y toma una decisión estudiada.
4. Seguridad
Si bien es cierto que una empresa digital se ahorra numerosos gastos físicos, la seguridad es uno de los puntos en los que más y mejor debe realizar su inversión digital. En este sentido, los ataques de los piratas informáticos son cada día más comunes y es preciso disponer de un hosting que posea sistemas que protejan a los usuarios. Asimismo, las copias de seguridad automáticas abren la posibilidad de guardar los archivos y datos de los clientes, de modo que, en caso de que el sistema sufra un colapso, poder recuperar la información relevante.
5. Uso sencillo
Por último, muchos usuarios no poseen los conocimientos necesarios para saber manejar un hosting desde dentro. Además, la mayoría de estas empresas poseen sus propios ingenieros, de modo que su configuración varía en casa caso.
Por ello, un buen hosting está diseñado de manera sencilla para el usuario. Antes de decantarte por alguno, puedes consultar en su propia web. Por ejemplo, el blog de Raiola Networks aporta información sobre su uso y disponibilidad, además de consejos sobre la creación de una página web.