Opinión Mundo Empresarial / Mariano Santos es Director de Relaciones Internacionales de PONS Patentes y Marcas Internacional y comparte con nosotros éste interesantísimo artículo de un tema de máxima actualidad
Hace algunos años se escribían en prensa especializada artículos sobre la importancia de conocer el valor de la propiedad industrial e intelectual desarrollada por las organizaciones como una herramienta de gestión necesaria, además se hablaba sobre los cambios de tendencia en relación con la importancia que habían adquirido los activos intangibles en detrimento de los tangibles (edificios, maquinaría…).
Pues bien, en la actualidad se han superado todos estos planteamientos iniciales, para dar paso a una nueva visión más mercantilista en detrimento de la visión mas marketiniana, más propia de los primeros años que siguieron al año 2000, en los que las grandes consultoras hablaban y escribían en los distintos foros a los que acudían del gran valor que tenían las marcas y patentes para medir la salud financiera de muchas compañías multinacionales.
Además, no debemos olvidar los grandes titulares con los que se anunciaban grandes fusiones y adquisiciones en las que la propiedad industrial (marcas y patentes) era su principal activo, tanto que conseguía aumentar el valor de la compra o de la fusión en millones de euros.
Actualmente nadie duda de la importancia de los derechos de propiedad industrial e intelectual y, al igual que en época de bonanza económica era una herramienta de marketing suficientemente conocida y utilizada por muchas grandes empresas, en épocas de crisis económica se siguen utilizando, pero ahora precisamente nos dan una visión completamente distinta o, al menos, el mensaje que se nos transmite es el de utilización de la propiedad industrial como instrumento de financiación.
Cada vez son más las empresas que han utilizado sus carteras de propiedad industrial como instrumentos de garantía para poder hacer frente a los problemas de liquidez a los que deben enfrentarse. De hecho, muchas compañías han comenzado a licenciar buena parte de su cartera de patentes para poder obtener la financiación necesaria para subsistir, y no nos cabe duda de que muchas grandes marcas han empezado a conceder franquicias con el objeto principal de salvar su subsistencia en el mercado obteniendo ingresos por royalties.
Como conclusión me gustaría hacer hincapié en que los profesionales que trabajamos a este sector no podemos dejar de transmitir siempre la importancia de proteger como marcas las denominaciones que utilizan nuestros clientes en el mercado para identificar sus productos o servicios, y lo enormemente importante que es proteger la innovación que desarrollan solicitando patentes, ya que, si bien es una herramienta defensiva para todos ellos, puede ser que el día de mañana la puedan utilizar para salvar a sus empresas de un problema financiero.
Por Mariano Santos
Director de Relaciones Internacionales
PONS Patentes y Marcas Internacional