Pocas leyes han suscitado tanta polémica como la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE). Tanto “ruido” hace difícil disponer de información práctica que nos permita conocer mejor el entorno educativo de nuestros hijos. En el siguiente artículo se expondrán de manera sencilla dos de sus principales aspectos: currículo y periodo de implantación.
La ley define el currículo como “los elementos que determinan los procesos de enseñanza y aprendizaje”, es decir, básicamente qué se enseña, cómo se enseña, y cómo se evalúa. Uno de los elementos principales son las llamadas competencias, que podemos describir como las capacidades o habilidades que los alumnos deben adquirir durante su formación y que serán los objetivos o referencias que los educadores se marcarán en su labor de enseñanza.
Cómo cultivar en el alumno esas competencias nos lleva al segundo concepto: contenidos, es decir, las asignaturas. ¿Cómo cambian las mismas? Veamos. En Educación Primaria la materia de Conocimiento del medio natural, social y cultural se subdivide en Ciencias de la Naturaleza y Ciencias Sociales. Educación Artística pasa a ser una asignatura optativa. En Educación Secundaria, en 3º se podrá elegir entre Matemáticas orientadas a las enseñanzas Académicas o a las enseñanzas Aplicadas. Y para todos los cursos desaparece Educación para la ciudadanía y se introduce como obligatoria la asignatura de Religión o de Valores Sociales y Cívicos. Puede parecer que los cambios no son muchos, pero en este punto debemos tener en cuenta un cambio importante en la ley: la nueva clasificación de las asignaturas en troncales, específicas, y de libre configuración autonómica, y la adjudicación al Gobierno de la selección de contenidos de las materias troncales. En la práctica este hecho supone que la mayoría de los libros escolares se renovarán completamente para los cursos en los que se vaya aplicando la LOMCE.
El periodo teórico de implantación de la LOMCE constaba de tres etapas: cursos 1º, 3º y 5º de Primaria en 2014/15; cursos 2º, 4º, 6º de Primaria más 1º y 3º de ESO en 2015/16 y finalmente cursos 2º y 4º de ESO en 2016/17. En la práctica las diferentes CCAA están siguiendo diferentes ritmos de implantación que, aunque deben tender a armonizarse durante el curso que comenzarán el próximo septiembre, todavía causa bastante confusión entre editores, distribuidores y colegios y en algunos casos está demorando la confección definitiva de los libros de texto a utilizar.
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